Mi nombre es Piedad Caballero González; nací en El Viso en 1937. Eran años duros ya que había guerra. Mi educación fue la de una familia humilde.

Siempre he vivido en mi pueblo. Cuando era pequeña vivía en la plaza del Cristo de donde guardo muy buenos recuerdos. Fui a la escuela hasta que cumplí 13 años, con esa edad ya empecé a trabajar.

Después de casarme me fui a vivir al campo porque mi marido era pastor. Vivíamos en un chozo hecho con paja. Allí nacieron mis dos primeros hijos. Cuando mi hija mayor cumplió 5 años, nos compramos una casa en el pueblo, en el Barrio Andalucía, donde nació mi hijo pequeño y donde he pasado mi vida desde entonces. Siempre he participado en las tradiciones de mi barrio; las más importantes son la fiesta de la Candelaria y las Cruces de Mayo. Es un barrio donde hay muy buena sintonía entre los vecinos/as, todos/as nos llevamos muy bien.

Soy una persona trabajadora, cuando era pequeña siempre ayudaba a mi padre en las tareas del campo y después fui a la sierra a coger aceitunas, primero iba con mis padres y después con mi marido hasta que me jubilé. También íbamos a Francia a la campaña de la uva.

Cuando era joven iba a bordar y aprendí a hacer punto, afición que, a día de hoy, sigo conservando y con lo que me entretengo en mis ratos libres; he hecho toquillas, chalecos y mantas para mis nietas.

Desde septiembre del año pasado soy usuaria del Centro de día de personas mayores de El Viso. Mis hijos me animaron a ir al centro para que estuviera más activa, y la verdad que estoy muy contenta desde el primer día; las chicas que trabajan allí nos tratan muy bien, no nos falta ni gloria, hacemos muchos trabajos que ya casi teníamos olvidados. Estamos aprendiendo muchas manualidades nuevas y hemos visitado lugares de la comarca que no conocía o que hacía mucho tiempo que no había visitado. Comparto las mañanas con varias vecinas del barrio y otras personas del pueblo que apenas conocía y con las que he hecho muy buena amistad. Somos como una gran familia.

Aunque cuando realmente conocí a Fundación PRODE fue muchos años antes, ya que mi marido fue usuario del Servicio de ayuda a domicilio durante 6 años y yo también lo soy. Por las mañanas voy al centro de día y por las tardes viene la chica de ayuda a domicilio a casa, con los dos servicios estoy muy a gusto. Por ello, doy las gracias a ambos por su labor y por su buen hacer con las personas.

Deja un comentario

Artículos relacionados